miércoles, 25 de noviembre de 2009


Para que no se enteren de que me he marchado, coloco mi almohada bajo las sábanas y simulo mi silueta tal como he visto hacer en algunas películas. El silencio reina en casa y aún no ha amanecido. Me alzo de puntillas para mirarme en el espejo del recibidor, cierro por un instante los ojos y compruebo que mi plan me acompaña. Introduzco la mano en el bolsillo derecho de mi chaqueta; sonrío y acaricio la pequeña ficha rectangular de la tarde anterior. Ansioso por llegar a mi destino, cierro muy despacio la puerta y apresuro el paso. Al llegar al recinto, compruebo entristecido que el tren ha desaparecido.

sábado, 21 de noviembre de 2009

La sombra del soberanismo


Aún con orgullo, el rey empuñó y alzó su espada al aire.
“Tenemos que estar preparados para la guerra“, gritó, armado de valor.
“Estamos dispuestos a derramar gloriosamente nuestra sangre”, clamaban al unísono los pájaros que habitaban en su cabeza.

martes, 3 de noviembre de 2009

Creación


El hombre se sintió apresado y perdido. Si fue obra de un Dios que lo creó a su imagen y semejanza; definitivamente, nada podría salvarlo de la imperfección.

viernes, 18 de septiembre de 2009

La perfección


Era el hombre más inteligente, más cariñoso, más bondadoso, más guapo y mejor amante que jamás pude conocer. Sin duda, hubiera sido una bonita historia de amor, pero no pude resistir tal cúmulo de perfecciones. No tuve más remedio que hacerlo antes de que fuera demasiado tarde. Ante los invitados al enlace, ni el silenciador ni mi puntería estaban dispuestos a delatarme. Solo lo hizo aquella imperfecta mancha roja que asomaba en su inmaculada camisa blanca justo a la altura del corazón.

sábado, 22 de agosto de 2009

El hechizo


Acurrucada en el refugio de mi sillón junto a la ventana, le oí cantar en su paseo nocturno. Había llegado el momento de conocerle. Sabía que si me acercaba, no podría resistirme al hechizo de la leyenda de quienes relataban algún encuentro. Aún sabiendo el riesgo que corría, siempre abrigué la idea de reunirme con él. Así fue como me dejé acariciar en su calidez y al compás de su baile supe que no habría vuelta atrás. No tardó en mostrar su verdadera cara. Su tibia melodía dio paso en un aullido despiadado. Nadie pudo ayudarme. En mi delirio, recordé vagamente que alguien dijo una vez "es el viento de los locos".

viernes, 10 de julio de 2009

El triste durmiente


El triste durmiente reposa amparado en un vapor soñoliento. Consciente de la necesidad de deshacerse de la pena que le envuelve, prefiere ocultar su rostro mientras espera la llegada de quien logre despojarlo de su halo de melancolía.
En esta creencia, poco lo diferencia de cualquier princesa. No logra ocultar que sus sueños también son de color de rosa.

martes, 16 de junio de 2009

La mesa número nueve


Aún recuerdo, aquel mes de febrero, en que circulaba un rumor por los cafés de Viena que tenía a todos los ciudadanos en vilo. Haciendo caso omiso a tan descabelladas habladurías y como desafío a un bulo supuestamente infundado, yo seguía puntual a mi cita matutina en el café de la esquina. En la mesa número ocho, junto a la prensa diaria, pasaba mi primera hora de la mañana entre olores a café y pastelería recién salida del horno, en un lugar privilegiado frente al ventanal. Serían cerca de la diez de la mañana, cuando un hombre cercano a los cincuenta empujó la puerta. En el descansillo, bajo un ventilador de aire caliente, se atusó con las palmas de las manos el resto de una melena de una añorada época hippie. Llegó apenas media hora después que yo, pasó detrás de mí y se instaló en la mesa contigua. Pidió un café, sin dejar de apartar los ojos de la calle mientras se quitaba la chaqueta pausadamente. Al cabo de unos minutos, llegó una mujer de edad incierta, caminó hacia mi mesa, me miró como si dudara en detenerse, pero prosiguió hasta la que se encontraba a mi lado. Mi vecino, tal vez por la impresión, ni siquiera hizo un gesto por levantarse. Se saludaron fríamente, pero con cierto aire de cordialidad, como a quien se espera, pero se ve por primera vez. Se sentó frente a él, de espaldas a la visión de los transeúntes caminando bajo la nieve, ni siquiera se molestó en quitarse el abrigo, solo en despojarse con sumo cuidado de unos guantes de cuero. Con una sonrisa gélida, sus manos se entrelazaron en un eterno silencio.
Hoy, después de tanto tiempo, sigo fiel al mismo café y al mismo lugar, junto a la estatua de piedra que ocupa la mesa número nueve.

miércoles, 10 de junio de 2009

La duda


Llovía afuera y yo sin paraguas. Busqué las llaves de casa, pero los bolsillos de mi traje estaban vacíos. En la oscuridad de la noche vislumbré luz en el salón. Llamé al timbre, pero parecía no funcionar. Entonces salté la verja y me acerqué a la ventana. Estabas plácidamente sentada en mi sillón. Al poco tiempo te levantaste sonriente; pensé que me habías visto. Sin embargo, alguien se te acercó con una copa y tú lo besaste sin dudar. Esta vez grité y golpeé el cristal repetidamente. Seguías sin oirme. Tenía que advertirte que aquel tipo era mi asesino. ¿O tal vez ya lo sabías?

martes, 2 de junio de 2009

Una pieza única


Lo mejor sería ir a por el destornillador. Minuciosamente empezó a aflojar uno a uno los tornillos que componían el cajón de madera que tenía ante sí. Tal vez hubiera sido más rápido y efectivo hacer palanca abriéndolo en un solo golpe seco, pero no quería dañar su contenido. Bastante habría sufrido ya con el traslado y la entrega a domicilio. Según el anticuario, se trataba de una pieza única muy difícil de conseguir. Así lo atestiguaba el certificado de autenticidad como su lugar de procedencia. Sin lugar a dudas, sería el mejor capricho que se había dado. No todos los días se adquiere un fantasma por encargo.

sábado, 30 de mayo de 2009

Insomnio (III)


Después de tanto tiempo, por fin concilié el sueño. Esta noche dormí boca abajo. Conseguí darle la espalda a los problemas.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Recuerdos


“¿Te acuerdas de mí?”, la abordó la desconocida nada más verla en el parque, llamándola por su nombre de pila. Ella respondió afirmativamente, con evidente cordialidad, feliz ante tal encuentro casual. Tras las fórmulas obligadas de cortesía, se preguntaron por la salud, se entristecieron al conocer que ambas habían quedado recientemente viudas, hablaron ilusionadas de hijos e incluso intercambiaron fotografías de los nietos. Fue realmente emocionante asistir al encuentro de dos amigas tras largos de ausencia.Tras despedirse de nosotras, le pregunté a mi abuela quién era aquella señora tan amable. Ella respondió: "no lo sé".

sábado, 23 de mayo de 2009

Herencias


Tatuado por el azar caprichoso de los genes, heredó la virtud de su madre y la adicción de su padre.
En los recitales de piano, con las manos aún temblorosas por el efecto del wiskhy, sonaban las mejores melodías.

lunes, 18 de mayo de 2009

Insomnio (II)


Abrió la ventana y le gritó: “Vete de aquí”
Y la angustia, saltó a la oscuridad exterior.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Sin regreso


En el efímero y veloz paso del tren, el viajero contempla el paisaje a través de la ventanilla. Su mirada oculta un deseo. Aunque lleva un billete de ida y vuelta, sabe que nunca más regresará.

domingo, 10 de mayo de 2009

La mendiga


-¿No le regalarías también el collar?- le preguntó su padre sin disimular su enfado.
-Si.- asintió cabizbaja.
-¡Ya te advertí que no hablaras con ella!
Su hija se había dejado seducir por aquella mujer menuda y encorvada que todas las noches se refugiaba en el cajero automático del banco y que cada mañana, cuando ella acudía a trabajar, la saludaba con tanta amabilidad.
-¡No lo entiendes, papá!- protestó.
-Tenía que deshacerme de todo aquello que me pudiera recordar a la madre que nunca conocí.
El padre se sintió hundido. Un nudo le apretaba la garganta. Sentía unas terribles ganas de decirle "ella es tu madre".

jueves, 7 de mayo de 2009

La pesadilla


Quiere creer que solo se trata de un mal sueño. Cuando despierte, todo habrá pasado. Nunca lo sabrá. Esta vez no pudo despertar.

miércoles, 29 de abril de 2009

Cuentos en seis palabras


Nunca pudimos bailar al mismo compás.
Perdió el sueño. Encontró la angustia.
En su silencio estaban las palabras.
En el beso sonó la alarma.
Cruzan miradas, sonríen, sobran las palabras.
Aquellos ojos lo persiguieron en vida.
Se encontraba agotado, su lengua no.
Nació, firmó su sentencia de muerte.
Lo mató. Se aseguró el secreto.
"Somos amigos"- dijo mirando al revolver.
Fantasma busca casa habitada. Prometo discreción.
Murió sin saber que había vivido.

sábado, 25 de abril de 2009

El ladrón arrepentido


Luego se fue corriendo a empujones entre el tumulto de la gente con el bolso colgado al cuello. Cuando llegó al parking, con el corazón desbocado y las manos aún temblorosas, entró en su coche. En un acto casi mecánico se miró en el espejo retrovisor. Aún no se podía explicar como había sido capaz. Con emoción violenta abrió el botín que el era tan familiar. Estremecido rasgó el sobre que contenía una sola hoja doblada en cuatro. Cuando terminó de leer su contenido, unas lágrimas acudieron a sus ojos. Nunca más volvería a dudar del amor que le profesaba su mujer.

miércoles, 22 de abril de 2009

La luna de Valencia


De pequeña, en el colegio, había una profesora que le tenía manía o eso creía ella. Cansinamente le repetía: “Rosita, como siempre, en la luna de Valencia”.
Hoy, después de tantos años, se alegra de seguir aún allí.

jueves, 16 de abril de 2009

Amotinamiento


La leyenda omitió contar que el arca de Noé sufrió un motín. La rebelión de los machos de las diferentes especies animales fue unánime. Todos se sublevaron ante la solitaria presencia de la hembra del dragón de Komodo. Aquello suponía un funesto presagio.
Nadie quería una pionera del feminismo que fuera capaz de asegurar la supervivencia de su especie sin la necesidad de un macho a su lado.

martes, 14 de abril de 2009

Envidias


Nos revolvía el pelo con cara de contento. Algunas veces repartía globos, otras, caramelos. No había en el colegio otro profesor que despertara tanto entusiasmo. Todo deslumbraba en él: el dominio de las materias, sus buenas maneras, exigente pero comprensivo y cariñoso a la vez. Era la envidia de sus compañeros de claustro. Un lunes dejó de venir por clase. Fue despedido sin motivo aparente. El director se limitó a decir que no era un modelo a seguir por sus alumnos. Corría un rumor injusto. En la intimidad, se pintaba la boca en forma de corazón y se daba rimel en la pestañas.

martes, 7 de abril de 2009

Niños ...


“¡Abuelo!” – dijo el niño emocionado -
“cuando seas pequeño, te prestaré mi bicicleta”.

viernes, 3 de abril de 2009

El día menos esperado


Recién levantado, con el pelo revuelto y con los ojos aún pegados por el sueño, se miró al espejo. En la cotidianidad de los gestos repetitivos, buscó la mirada triunfadora que siempre exhibió con orgullo.
Sin embargo, hoy no es la misma. La nota algo diferente. Lo incomoda. A pesar de su empeño, no puede evitarla. Allí está ella persistente e inalterable. La conciencia hizo su acto de presencia.

domingo, 29 de marzo de 2009

Un ligero retraso


Cerré la puerta despacio, sin hacer ruido. Allí estaba ella esperándome, vestida para la ocasión. Con los brazos cruzados, taconeando impacientemente su pie derecho, miraba insistentemente su diminuto reloj de pulsera. Advertí la señal de protesta.
Así comenzó, como últimamente venía siendo habitual, su monólogo convertido en un incesante interrogatorio: “¿Por qué tienes que llegar siempre tarde?, ¿de dónde vienes a estas horas?, ¿con quién has estado?…”
Mientras tanto, andaba de un lado para otro de la habitación, gestualizando con ostentosa expresividad y vocalizando con tal perfección, que incluso yo, me llegué a sorprender.
Sin duda, debió ser una magnífica interpretación. El público se reía a carcajadas.

martes, 24 de marzo de 2009

El tribunal


Fue llamado a declarar. Estaba dispuesto a darlo todo por ella. Juró solemnemente decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Nadie le advirtió que tendría que poner la mano en el fuego.

jueves, 19 de marzo de 2009

En un instante


Hace tan solo un momento dos amigas se encuentran charlando en la calle donde viven. Comparten confidencias y fantasean con el futuro del aún lejano devenir adulto.
De pronto, en un abrir y cerrar de ojos, sin apenas darse cuenta, se encuentran charlando en la misma calle. Comparten confidencias y añoran el pasado de una ya alejada niñez.

sábado, 14 de marzo de 2009

La mujer invisible


Él, lleno de ardor y desprecio, pensaba en el final. Lo estaba pasando francamente mal. Tenía que acabar con aquella situación.
Ella, le habla entre susurros para que nadie la oyera. Manejaba la casa a su antojo y se empeñaba en seguir ocupando el lado izquierdo de la cama. Cuando hacía la compra, le indicaba lo que tenía que adquirir y si iba al cine o al teatro, siempre imponía su decisión. Incluso cuando se paraba a saludar los amigos, le preguntaban por ella. No podía soportarlo más. Le resultaba imposible excluirla de su memoria.
La culpa era de aquellos boleros que a ella tanto le gustaban. Cuando la añoranza lo invadía, él, se los cantaba en silencio.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Un contratiempo


En la puerta había una gorra negra y sobre el mueble del recibidor unas gafas de sol. Sacó la llave de la cerradura y se sonrió al cerrar.
Un olor familiar invadía el apartamento. Reconoció su plato favorito y le sedujo la idea de una cena sorpresa. Sin embargo, él no salió a darle la bienvenida. No la había odio a causa del ruido ensordecedor de la campana extractora. Se sintió algo desconcertada. Recordó que no pudo llamar para decirle que adelantaba su regreso. Con precaución y expectante se asomó al comedor. La invitada estaba sentada a la mesa.

domingo, 8 de marzo de 2009

Mariposas


Con sus trajes de fiesta, inquietas, revolotean sin cesar ajenas a todo. En un suave cosquilleo, siente el roce de sus alitas. Menudas e invisibles, se han instalado placidamente en su estómago.

viernes, 6 de marzo de 2009

La bella durmiente


La bella durmiente reposa en su lecho. Con admirable paciencia simula su sueño. Con los ojos cerrados y los oídos bien abiertos permanece atenta a la llegada del príncipe. Ella sabe que a los hombres no les gustan las mujeres que sueñan despiertas.

viernes, 27 de febrero de 2009

Insomnio


En el silencio y oscuridad de la noche, a mi cabeza le daba por pensar en todo lo que no debía. Yo, no lograba conciliar el sueño, me pasaba las noches en blanco. No tuve más remedio que buscarle compañía. Desde que tenemos una televisión por compañera de alcoba, mi cabeza y ella se han hecho grandes amigas. La televisión piensa por ella y a mí me dejan dormir.

martes, 24 de febrero de 2009

Carnaval


Atrás quedaron el baile y las risas. Con la resaca aún latente de la gran fiesta y bajo un amanecer semidormido caminó de regreso a la realidad. Hoy retomará la máscara de la rutina bajo la que ocultarse. Volverá a ser un anónimo más jugando a ser quien no es.

viernes, 20 de febrero de 2009

Fracaso musical


Llegó el día del estreno. Andaban nerviosas. Todas las notas se pusieron de acuerdo en dar la nota.

jueves, 12 de febrero de 2009

Una noche inolvidable (2ª Versión)


Salvo quizás, por esa casi imperceptible gota de sangre seca sobre la almohada, él nunca hubiera sospechado. El dolor era inapreciable.
La lluvia golpeaba el cristal de la habitación y todavía faltaba algunas horas para que amaneciera. Tendidos sobre la cama, con el desorden aún de las sábanas, volvió a acariciar la piel sedosa de su cuerpo desnudo. Turbado por el deseo, ansiaba atesorar cuidadosamente aquel momento de fugaz felicidad.Súbitamente, sintió un escalofrío. Tal vez fuera fruto del delirio. Sus temores se hicieron realidad. Cuando ella lo miró, tras sus ojos brillantes y su leve sonrisa, unos incipientes colmillos asomaban entre sus voluptuosos labios.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Preliminares


"¿Me quieres?" - le preguntó ella.
Él, permaneció callado. No llegó a comprender la pregunta. No supo qué contestar.
Decididamente, no hablaban en el mismo idioma.

domingo, 8 de febrero de 2009

Reformas


La reina decidió remodelar el palacio y convertirlo en un loft. Ordenó derribar muros, tabiques y paneles. A partir de entonces, cesaron las intrigas. Las paredes dejaron de oír.

jueves, 5 de febrero de 2009

Letrilandia


No podría decir cuanto tiempo lleva contemplando las letras escritas que ponen su nombre, el nombre que aún no sabe leer.
Abraza el libro con ternura contra su pecho. Se observa disimuladamente frente a los cristales de la puerta de la cocina. Sonríe. Ensaya su entrada al aula y se ruboriza de solo pensarlo.
Hoy es su primer día de clase. Tan solo tiene sesenta años y toda una ilusión por delante.

martes, 3 de febrero de 2009

Cinco minutos


En casa albergamos un reloj que se empeña en adelantarnos la vida. Sin lugar a dudas, nos beneficia. Jugamos con ventaja. Siempre llegamos a toda cita antes de lo previsto. Aunque en él no existe maldad, solo abrigamos un temor: que con el tiempo a su favor, nos adelante el encuentro con algún destino inesperado.

domingo, 25 de enero de 2009

La última escapada


Llevabas muerta cinco días cuando a media tarde llamaron al timbre. Me lo temía. Sabía que en algún momento tendrían que interrogarme.
Asistí al breve relato de tu desaparición y fui debidamente informada del desarrollo de la investigación. Con una sonrisa forzada quise hacer como que no entendía nada pero la ansiedad empezó a delatarme.
El inspector me clavó su mirada. Al pedirme la documentación para verificar mi identidad, fue inútil disimular. Confesé. Yo no tenía la culpa de que mi nombre tuviera una doble vida. Junto a la fotografía del pasaporte, a Rosa ya no le acompañaba María.

Secretos


Gemelas disímiles condenadas a vivir juntas. De intereses diferentes y aunque una siente envidia de la otra, lo saben disimular a la perfección. Con infinita rabia saben guardar sus secretos. Lo que sabe la derecha, no lo sabe la izquierda.

viernes, 23 de enero de 2009

El coleccionable


Se fue aficionando a la lectura de la prensa escrita a la par que iba adquiriendo todo lo necesario para su nueva casa.
Primero llegaron diversas opciones para el ocio. Le fueron siguiendo los utensilios y recetas necesarias para hacerse una experta en artes culinarias. Finalizó con un repertorio indefinido de objetos propios del hogar. Sin embargo, aún le faltaba lo esencial.
Hoy está entusiasmada, anuncian la colección que más ansiaba. Para el domingo ya tiene su ejemplar reservado. La primera entrega: el brazo derecho del compañero ideal.

sábado, 17 de enero de 2009

El placer del baño


Hoy lo ha vuelto a hacer. Mamá se ha vuelto a encerrar en el cuarto de baño. Bueno, hoy y casi todas las noches después de besarnos y desearnos felices sueños. La vengo observando. No se oye ningún ruido y no tarda más de treinta minutos. Hoy he descubierto su misterio. Detrás de sus ojos enrojecidos y de su ligera sonrisa, siempre se esconde un libro entre sus manos.

jueves, 15 de enero de 2009

Tarde de domingo


Le apetecían unas palomitas de maíz. Quería ver una película romántica. Sentía una tremenda necesidad de llorar. A la mañana siguiente, cuando la asistenta abrió la puerta del apartamento, solo encontró unos restos de palomitas en el sillón y su ropa amontonada en el suelo junto a un gran charco de agua delante del televisor.

domingo, 11 de enero de 2009

La impostora


Apenas abría la puerta, todo sabía a ella. En el beso, en el silencio y en la disculpa. Me hablaba con cariño, mientras me seducía con su aparente inocencia y fingía con su falsa naturalidad. Como siempre, tan sencilla y cotidiana ella, hasta cuando reposaba sobre mi regazo, sabía tratarme con afecto.
Llegó el momento en que la descubrí. Fue imperdonable. Me di cuenta de que era una impostora llamada mentira que quería acabar con la verdad.

lunes, 5 de enero de 2009

El beso


Con esmerada delicadeza y frialdad, eligió el perfume a obsequiar a su mejor amiga. La noche en que su marido la besó y percibió el aroma, sonaron las alarmas. Se confirmaron sus sospechas.

Diciembre 2008


Anotó y enumeró todos los buenos propósitos para el nuevo año. Cuando llegó Enero, ya se había olvidado de ellos.

viernes, 2 de enero de 2009

Fuera de uso


Difícil tarea la demanda por mi enamorada, el frigorífico sin reservas y la cabina del ascensor accidentalmente averiada. Y así, cual garra de un mono aferrada a la barandilla de las escaleras, cuesta arriba hasta la planta 17.
Una cansada llave abre la puerta, y oculta tras el espejo, la misma muerte a la espera.

jueves, 1 de enero de 2009

Pecado original


Como viene siendo habitual, Adán llega a casa a última hora, se descalza en cualquier lugar, pregunta qué hay de cenar, agarra una cerveza y se tumba en el sofá frente al televisor para gritarle al primer árbitro de turno que se pasee en ese momento por la pantalla. Eva, mira su marido y piensa que nunca debió de caer en la tentación de compartir aquella hamburguesa mordisqueada que Adán le ofreció tanto años atrás y que le costaría la expulsión del paraíso.

La Alfama


Hacía tres años que había muerto la tía Blanca y desde entonces guardaba en el armario los stilettos que mamá tiró a la basura. “Olvídate de los zapatos de la tía, solo te proporcionarán dolor y sufrimiento, como a ella le ocurrió”, me dijo tajante.
Así, en aquel viaje a Lisboa, quise llevarlos de paseo al pasado. En una primera sensación, me sentí joven, bonita, feliz, ligera como un suspiro. Pero, conforme iba subiendo una de las cuestas de Alfama, el dolor me iba ganando con intensidad. El lamento de los amores perdidos, el resquemor de mis fracasos, el abismo de mis recuerdos, iban pasando factura a mi insensatez. No tuve opción, allí mismo, junto a una papelera, con una mirada de disculpa, me despedí de ellos.