
Lo mejor sería ir a por el destornillador. Minuciosamente empezó a aflojar uno a uno los tornillos que componían el cajón de madera que tenía ante sí. Tal vez hubiera sido más rápido y efectivo hacer palanca abriéndolo en un solo golpe seco, pero no quería dañar su contenido. Bastante habría sufrido ya con el traslado y la entrega a domicilio. Según el anticuario, se trataba de una pieza única muy difícil de conseguir. Así lo atestiguaba el certificado de autenticidad como su lugar de procedencia. Sin lugar a dudas, sería el mejor capricho que se había dado. No todos los días se adquiere un fantasma por encargo.
17 comentarios:
y a veces aparecen los fantasmas sin haberlos llamado
me gusta la sencillez de tu blog
un beso
Yo por encargo mandaría los fantasmas a Marte, bien lejos!!!
Besos.
Antiguos quizá queden pocos, pero fantasmas contemporáneos, por desgracia, creo que hay muchos. Pero creo que este fantasma es de otro tipo, amiga Clara, es ese que tantas veces nos acompaña, que se hace nuestro mejor amigo, con el que conversamos y compartimos complicidad ¿a que si? Por eso para el perdonaje del relato debió parecerle el mejor capricho que se había dado...al final lo consiguió.
Genial tu historia.
Un abrazo.
No, no, no. Corre, ve y dile que no termine de abrirlo, que si le muestra la libertad sólo le quedará el cajón vacío. Y no cualquiera tiene un fantasma real en un cajón, caramba!
Saludos reina!
Recomiendo leer muy bien las instrucciones antes de abrir la caja. E incluso tomar una lupa y leer la letra menuda...
Un saludo.
jejeje...Que ocurrencia. Yo aflojando con el destornillador mentalmente esperando...un fantasma. Si es que vaya cabecita la tuya tan original.
Besix
Original encargo el que venía en esa caja! Ahora tendrá compañía siempre.
Besitos,
Me gusto mucho el relato! Me queda una sola duda: el fantasma no podía salir de la caja sin necesidad de abrirla? Tengo entendido que tienen la capacidad de atravesar paredes! Muy bueno! Un beso
Que suerte tener que comprar un fantasma...con los que nos persiguen tan a diario...un abrazo
ay¡¡¡ que se me olvidó...te espero en el comentario del prólogo y la dedicatoria...d DQ..tu sabes...besos
Je, je, je. Cuidado con tu fantasma, no te vaya a salir travieso. Un beso fuerte, amiga y feliz fin de semana. Gracias por felicitarme por mi cumple. Hasta pronto.
Jejeje, me ha gustado la idea... me tienes que decir dónde los venden, hay veces que me hace falta algún fantasma de esos que me soporte un rato, pero no de los contemporáneos que dice José Manuel.
¡Qué ideas se te ocurren más curiosas!
Un besote.
Óriginal escrito querida Clara, un placer inmenso visitarte amiga, espero que no encontraras fantasmas en el arcón
Un abrazo, stella
Yo cuanto más lejos los tenga, mejor!
¿Viste el cuento ganador? A mí me gustó.
Una pieza única. Tú eres única. Cada uno de nosotros lo somos.
Y con nuestros fantasmas que nos acompañan por donde vamos, somos tan únicos e irrepetibles que hasta damos miedo.
Pero vamos juntos: nosotros y nuestros fantasmas, los que pueblan nuestros sueños, nuestras vidas ocultas, nuestro vivir diario....
Un besazo
Y el fantasma se parecía tanto a él como un espejo, verdad?
Un beso.
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