lunes, 5 de enero de 2009

El beso


Con esmerada delicadeza y frialdad, eligió el perfume a obsequiar a su mejor amiga. La noche en que su marido la besó y percibió el aroma, sonaron las alarmas. Se confirmaron sus sospechas.

3 comentarios:

combatientes70 dijo...

leerte es todo un placer... ya no estoy en martos... vuelvo a él cada vez que sea necesario, allí están mi familia, mis amigos y parte de mis raíces... pero sólo eso... sigue publicando microrelatos que nos arropen y nos den tantos universos infinitos y paralelos...

Unos zarcillos pa mi luna : dijo...

Te sigo desde hace un mes, a la vera del combatiente...me gusta y me emociona que del pueblo siga brotando talento...con lo difícil que lo ponen.

Un abrazo.
R.

El antifaz dijo...

Hola Clara, me paro aquí. Esta entrada es maravillosa. Será por eso que la nariz y la boca están tan juntas, para que un beso no sea sólo tacto, aunque huela a alarma.
Sigo por aquí.