domingo, 8 de febrero de 2009

Reformas


La reina decidió remodelar el palacio y convertirlo en un loft. Ordenó derribar muros, tabiques y paneles. A partir de entonces, cesaron las intrigas. Las paredes dejaron de oír.

4 comentarios:

El antifaz dijo...

Sí. Vamos a quitar todas las persianas que esconden a alguien detrás. Vamos a espiar a los espías. Vamos a cortar la lengua de los que callan en público. Aunque se les deje en evidencia.
Un beso.

Jesús dijo...

Quitar las barreras, dejar entrar la luz. ¡Qué reina más sabia!

Y en nuestro palacio interior es aún más difícil pero imprescindible si queremos escuchar el silencio, la paz...

Un beso

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

a muchos les sobra la lengua, con la boca para comer tienen bastante...salud

combatientes70 dijo...

los muros están dentro de uno... pero bellisima metáfora...